lunes, 24 de diciembre de 2012

La sonrisa de un sueño.

El abuelo se ha quedado dormido
los arrugas de su cara dibujan una sonrisa,
diera yo un deseo por conocer su sueño
cierro los ojos y siento la suavidad de una brisa.
En silencio y con mucho respeto
entro en su sueño lleno de niños, de gritos y risas,
pero no veo al abuelo con arrugas en la cara,
es ahora un niño que grita y rie con los niños,
se ha convertido en una risa sin recelos,
en una explosión de alegrías sin miedos,
mi vida diera por dar eternidad a su sueño.
En silencio y con mucho respeto
voy saliendo de aquel mundo de milagro,
el abuelo todavía sonríe,
pero ahora una lágrima brilla en sus ojos
ha sido feliz por un rato.                                                         

No hay comentarios:

Publicar un comentario