sábado, 23 de noviembre de 2013

Respeto a la ajena ilusión. Soneto.

Han encendido las luces del cielo
han iluminado el universo
el mundo es alegría y verso
no entre en tu corazón el hielo.

Cierra los ojos, vive tu anhelo
destierra para siempre al perverso
no verás de él mas que el reverso
su sonrisa es solo un señuelo.

Abre bien los brazos a la libertad
llena tus ojos de la eterna luz
no esperes nunca la compasión.

Llena bien tus sentidos de humildad
no conviertas tu vida en una cruz
y no cortes la ajena ilusión.

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