Mi abuela siempre me decía,
el demonio tiene cara conejo,
y fuego en las encías,
no quieras ser su amigo,
sigue mi consejo.
Pero tiene cuerpo de chacal
hocico de hiena,
espanto de animal,
una horrible fiera.
Esta es la criatura
que visita sus sueños,
su espíritu tortura
y tórnalos negros.
Es animal o es diablo,
si está despierto no puede,
por eso espera,
a que esté soñando.
Retrocede chacal
huye mala hiena,
que duerme el chaval
su paz no hieras.
Por siempre maldito serás
siempre al acecho
de la buena gente,
del silencio nunca gozarás
da mucha pena tu suerte.
No sé si tu existencia
es un sueño ardiente,
que una mente calenturienta
ha sembrado en nuestra mente.
Pero viendo las calamidades
que vive mucha gente,
ganas dan de pensar
en el espíritu de la muerte.
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