La campana pequeña.

En un pueblecito de Extremadura,
me contaron esta historia,
y es bien cierto que en mi memoria,
no guardo nada con tanta ternura.
En el campanario viejo del pueblo,
en la falda de una colina escarpada,
tres campanas muy grandes,
y ninguna de ellas sonaba.
Humilde ,junto a ellas,una campana pequeña,
tambien triste,tambien muda.
Nadie recuerda su música.
Ya no llaman a cristianar,
ya no tocan a arrebatos,
ya no tocan horas ni cuartos.
Paseando la campiña,un abuelo,
recordando su vida en el pueblo,
dobla su rodilla en mal paso,
y cae inconsciente en el suelo.
En la cabeza sangra una herida,
el viejo,triste mira a lo alto,
solo ve su campana querida,
y sin que nadie entienda,que pasa,
se oye en el pueblo,el tañido triste,
de la pequeña campana muda.
Se acercan sorprendidos los vecinos,
curan las heridas de su viejo querido.
Ahora ya entienden lo sucedido,
los tañidos de la campana pequeña,
ha sonado en sus mentes,
son gente buena,son buenas gentes.

En lo alto, la campana pequeña parece que sonríe.


Y es lo que yo digo,
a quien puede hacer daño
unas gotas de sueños y fantasía.