Si escuchas con atención,
oirás el concierto del mar,
es música de silencios,
es musica de susurros,
y también de besos en la oscuridad.
En las noches negras de temporal,
las olas se agitan enfurecidas,
asustan con su música infernal,
y las aguas se tornan fieras heridas.
Pero si escuchas en noches serenas,
las aguas del mar suenan a violines,
que más parecen gemidos de sirenas,
que cruzan el mar a lomos de mil delfines.
Y si reposas en la misma orilla,
oirás la música dulce y lenta,
de unas olas que entregan su vida,
antes muy brava y violenta.
Los días de sol exultante,
la música del mar impone respeto,
se oyen sus notas,solo un instante,
pero te atan el corazón con un nudo muy prieto.
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