Una reflexión sobre la vida.

La vida eres tú y los que contigo viven.
Son tus sombras y son tus luces.
Cuendo sufres y cuando ries.
Son las aguas del mar y los ríos.
Es el sol de cada día.
Y todo lo quieren cambiar, en un loco frenesí.
Dejar huella, vivir mejor.
Y lo que de verdad necesitas para vivir,
eso no cambia nunca.
El sol, el agua,las plantas,el calor,el frío,la lluvia,
los animales,la noche,el día, el verano y el invierno,
la sangre en nuestras venas y todo lo que nos da vida,eso no cambia.
El mundo no cambia.
cambiamos nosotros.
cambian los niños porque les hemos quitado las calles
donde jugaban,corrían y crecían.
La escuela les daba calor y ánimos para empezar a andar.
Los padres sabían compartir su tiempo con sus hijos.
Hoy muchos ni pueden ni saben.
Feliz el niño que encuentra a su lado a sus padres.
Felices los padres que encuentran a sus hijos,cuando aún sin saberlo,
buscan en ellos el calor de una caricia, la ternura de un beso,ese momento
compartido. Eso no puede cambiar nunca.
Descansa tu mente, cierra los ojos y piensa que estás viviendo,
que estás sintiendo en tí,la vida.
Que no nos pase la vida,"ocupados" en la tontería vital del pasatiempo.
Si tienes salud vívela con alegría consciente.
Si estás enfermo doblega con tu fuerza interior el dolor y vive el coraje de tu lucha.
Me duele ver en tu rostro esa expresión de tristeza, porque crees que las cosas
debieran ser diferentes.Tú trata a los demás con dulzura y piensa que todos necesitan de tu comprensión, generosidad,amor y alegría.
Esa es la única manera que la vida se adapte a tu generoso e impaciente ritmo.
Y si no lo consigues "YA" un poco de paciencia, leñe,que todos necesitamos un poco de espacio y u un mucho de alegría para vivir. Se me olvidaba "no quieras que siempre
prevalezca tu razón" aunque muchas veces la tengas.